“Mi poder en la opinión pública
Tú lees lo que yo quiero que leas.
Tu opinión está supeditada a la información que te doy, a mis intereses políticos o económicos, a mi estado de ánimo.
Aquí hablo bien de alguien si me conviene, y hablo mal de esa misma persona, si me pagan lo suficiente.
Tengo tanto poder que bien podría tumbar Presidentes, ponerte a ti, y a tus vecinos a favor o en contra de cualquier proceso, hacerte comprar porquerías que no necesitas, o evitar que compres cosas que sí necesitas.
Un estado puede ser agitado y conmovido por lo que yo diga, pero la verdad es que todos estamos contentos con lo que callo.
Si ya me aburrieron los indígenas, me dedico a desprestigiarlos, ¿y qué?
Si algunos de mis empleados se beneficiaron con el capitán que les conseguía viajes a todos lados para ellos, sus familiares o sus amantes, simplemente informo, pero ya sabré cómo protegerlos a todos.
Si alguno de ustedes osa hablar mal de mis amigos, cuestionar su capacidad de gestión, u oponerse a procesos en los que yo voy a obtener dinero, usaré mi equipo de investigación para que los ausculte hasta encontrar su rabo de paja.
Tú lees lo que yo quiero que leas y punto.
Pero por un capricho de los dioses, esto no es más que un simple blog.
Si toda la ciudadanía tuviera acceso a un blog, o si yo lograra que toda la población me leyera a bajo costo, entonces sí sería poderoso.
Así como los periódicos, radios y canales de televisión.”
Tuesday, March 28, 2006
What is the NAPI??
No se, pero transcribo un texto publicado el 28 de marzo:
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